Este viernes, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictaminó que Israel debe detener “inmediatamente” su ofensiva en Rafah, ciudad ubicada en el sur de Gaza.
La CIJ, máximo tribunal de Naciones Unidas, sostuvo que el fallo fue producto de una serie de medidas cautelares destinadas a impedir los crímenes de genocidio en el territorio palestino.
En su fallo, la CIJ dijo que “no estaba convencida” de que las medidas de evacuación de Israel fueran suficientes para proteger a los civiles palestinos.
“El Estado de Israel (…) detendrá inmediatamente su ofensiva militar y cualquier otra acción en la gobernación de Rafah, que pueda infligir al grupo palestino en Gaza condiciones de vida que podrían provocar su destrucción física total o parcial”, afirmó esta mañana Nawaf Salam, presidente de la CIJ.
También se le pidió al gobierno de Benjamin Netanyahu que permita el acceso en el paso fronterizo de Rafah con el propósito de que los ciudadanos de Gaza reciban ayuda humanitaria.
Un panel de 15 jueces de todo el mundo participó de la votación que finalizó 13 a 2, con las oposiciones de los jueces de Uganda e Israel.
El CIJ puede emitir fallos jurídicamente vinculantes en disputas entre países, aunque dispone de pocos mecanismos para que sus sentencias sean acatadas y finalmente cumplidas.