Luego del brutal atentado en Pensilvania durante la tarde del sábado, Donald Trump brindó una entrevista exclusiva y habló acerca de cómo vivió el estremecedor momento en el que una bala le rozó la oreja. “Se supone que no debería estar aquí, se supone que debería estar muerto”, expresó.
El exmandatario y actual candidato presidencial estadounidense considera que está vivo “de milagro” luego de escuchar las palabras del personal de salud que lo asistió tras la agresión.
“El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo llamó un milagro”, dijo en diálogo con el diario The New York Post. El mismo expresidente fue el que manifestó que a pesar de su carácter “a veces desafiante”, hoy “se supone que debería estar muerto” por los disparos.
Durante la entrevista, el candidato republicano sostuvo que mientras los agentes del Servicio Secreto lo sacaban del escenario, él aún quería seguir hablando a sus seguidores, pero los guardias le dijeron que no era seguro y que tenían que llevarlo a un hospital.