En mayo, el vínculo entre OpenAI y Jony Ive se confirmó públicamente cuando la organización detrás de ChatGPT anunció que pagaría 6.500 millones de dólares para comprar a io, la empresa del exdiseñador de Apple. Esa operación ratificó los rumores que circulaban respecto a un producto de hardware centrado en funciones de Inteligencia Artificial.
¿Cuándo veremos los frutos de esa colaboración? Un informe del Financial Times asegura que el proyecto se ha topado con algunos “problemas técnicos” que retrasarían el lanzamiento del dispositivo, inicialmente previsto para el próximo año.
Según fuentes consultadas por el FT, una de las claves de este trabajo conjunto es conseguir una voz adecuada para el dispositivo, con la intención de que sea un asistente personal y no una “rara novia robótica”. Lo cierto es que aún no hay detalles sobre este equipo, que en el pasado fue descripto como “el iPhone de la IA”, una referencia que no apunta tanto al formato de los smartphones, sino a la revolu
Además de ese reto —aquello de definir la voz del dispositivo—, uno de los principales desafíos que enfrentan OpenAI y el grupo de Ive está vinculado a la privacidad que debería ofrecer un producto de esta especie, diseñado para escuchar al usuario a tiempo completo. Otra de las variables problemática en el desarrollo es el presupuesto; es decir, el equilibrio entre las altas exigencias de un dispositivo de esta especie en cuanto a procesamiento y el precio con el que llegaría al mercado.
Por el momento, no se sabe qué forma tendrá este equipo centrado en IA. Sam Altman, CEO de la organización que desarrolla ChatGPT, solo compartió algunas pistas. Dijo que será compacto, que no contará con una pantalla y que tendrá capacidad para reconocer el entorno para actuar en consecuencia.



























