La campaña mundial de este año tiene como lema 20 años celebrando la generosidad: ¡Muchas gracias, donantes de sangre!, en conmemoración del hito del vigésimo aniversario y por el profundo impacto que tiene la donación de sangre en la vida de pacientes y donantes.
El Ministerio de Salud y Deportes, desde el Centro Regional de Hemoterapia, en este día tan especial, invita a los donantes voluntarios, colaboradores y a los medios a interactuar en una jornada de desayuno y juegos de 8.30 a 12.30 en Montecaseros esquina Garibaldi.
Así también, el Centro Regional de Hemoterapia de Mendoza (CRH) continúa con un clásico de los últimos años: la campaña con el hashtag #ponetealgorojo, el viernes 14 de junio.
El Ministerio de Salud recuerda que, para donar sangre, se puede hacer de lunes a viernes de 8 a 14.30 en Montecaseros esquina Garibaldi de la Ciudad de Mendoza.
Debido a la respuesta positiva en el primer festejo, el 14 de junio de 2004,
se oficializó esa fecha en mayo de 2005, en la 58ª Asamblea Mundial
de la Salud. Ministros de Salud de todo el mundo presentaron una declaración unánime de compromiso y apoyo a la donación voluntaria de
sangre por medio de la resolución WHA58.13.
Instituyeron el Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra cada
año el 14 de junio como muestra de reconocimiento y agradecimiento
hacia los donantes voluntarios de sangre de todo el mundo. La fecha
conmemora el nacimiento de Karl Landsteiner, patólogo y biólogo
austríaco que descubrió los grupos sanguíneos ABO.
El objetivo de concientizar en esta fecha es, principalmente, reconocer y
dar las gracias a los millones de donantes voluntarios de sangre que han
contribuido a mejorar la salud y el bienestar de millones de personas en
todo el mundo. Asimismo, dar conocer la necesidad permanente de que haya donaciones de sangre periódicas para lograr el acceso universal a
transfusiones de sangre seguras y motivar la donación habitual de
sangre en la juventud y el público en general.
Las transfusiones de sangre tienen un papel fundamental en la atención
de salud, ya que benefician a pacientes que presentan problemas de salud
que ponen en riesgo su vida, y los ayuda a ellos a vivir más tiempo y a
tener una mejor calidad de vida. Además, son un apoyo en procedimientos
médicos y quirúrgicos complejos, son indispensables en los servicios de
atención materno-infantil y en casos de desastres de origen natural o
causado por los seres humanos.
Desafortunadamente, en muchos países, la demanda es mayor que la oferta,
y los servicios de sangre enfrentan el reto de que haya suficiente
sangre disponible y, al mismo tiempo, de garantizar su calidad y
seguridad. Las donaciones de sangre voluntarias y no remuneradas
constituyen la base de un suministro de sangre seguro y suficiente.
¿Quiénes pueden donar?
Cualquier persona sana, entre 16 años y 65 años, que pese más de 50 kg y
goce de buen estado de salud. El tiempo que debe transcurrir entre cada
donación debe ser mayor a 8 semanas, teniendo en cuenta que las mujeres
pueden hacerlo hasta 3 veces por año y los hombres hasta 4.
Una donación de sangre puede salvar cuatro vidas. La sangre extraída es
fraccionada en sus componentes principales: glóbulos rojos, plasma,
plaquetas y crioprecipitados, que serán transfundidos a cada paciente
en función de sus necesidades.