La reciente suba del riesgo país, que sumó más de 100 unidades desde fin de junio, genera preocupación entre los analistas del mercado, en tanto el Gobierno necesita volver a emitir deuda en el exterior en 2025, con el fin de refinanciar vencimientos en moneda dura por US$16.000 millones.
El dato surge de un informe de Criteria en base a datos recopilados por la consultora 1816. De ese total, unos US$10.000 millones corresponden a pago de bonos y Bopreal. El resto, se reparte entre giros pactados al FMI (US$3300 millones) y vencimientos de deuda provincial por unos US$2700 millones. A eso se podrían añadir US$2500 millones del tramo activado del swap con China, cuyo pago se postergó este año y empezará a realizarse en 12 cuotas a partir de mediados de 2025.
Con esos números, el Gobierno cree que lo ideal sería volver al mercado internacional de deuda para refinanciar. El ministro Luis Caputo es un experto en ese tipo de operaciones, pero sabe que no podrá colocar bonos con tasas de riesgo país superiores a los 1500 puntos, como las que se vieron esta semana.
En pocas palabras, el riesgo país es la tasa que debería pagar la Argentina para financiarse en el mercado de deuda. Un indicador en 1500 unidades equivale a un costo base de 15% por encima de la tasa de Estados Unidos (que hoy fluctúa entre 5,25% y 5,50%). En la actualidad, los bonos argentinos cotizan con rendimientos de entre 17% y 25%, un valor absolutamente prohibitivo para colocar nueva deuda.