Desde que Javier Milei asumió la presidencia, hace casi 20 meses, puso en marcha un fuerte reordenamiento de los precios relativos de la economía. Es decir, se liberaron los valores de bienes y servicios, y ahora quedó plasmado una suerte de nuevo mapa de los precios en la Argentina, en el que varios están adelantados y otros siguen desactualizados.
En el inicio de la gestión y después de la devaluación aplicada a fines de 2023, se desregularon la mayoría de los precios de bienes y servicios. Más adelante, a mediados de 2024, la inflación empezó a desacelerarse y el tipo de cambio se apreció, pero los salarios perdieron poder de compra.
Ahora, el esquema de los precios en la Argentina deja a la vista una nueva reconfiguración. Un informe realizado por la Gerencia de Estudios Económicos del Banco Provincia mostró que la inflación acumuló una suba de 220% desde noviembre de 2023 hasta junio de 2025.
En este escenario, los servicios públicos -como vivienda, transporte y comunicación- ganaron más de 25% en términos reales, pero otros servicios privados -como educación, salud, restaurantes, cines y hoteles- están actualmente un 12% encima respecto al momento en que asumió Milei.
En el mismo período, alimentos y bebidas quedaron 8% por debajo del promedio de precios, en comparación con noviembre de 2023. Otros bienes -como los electrónicos, ropa, motos o muebles- se encarecieron aún más, y se ubicaron 12% por debajo. “Esta reconfiguración de precios es típica de los procesos de apreciación cambiaria: los servicios suben más que los bienes”, expresaron en ese centro de estudios.
Por su parte, los salarios formales subieron 190% entre noviembre de 2023 y abril de 2025, por lo que perdieron 6,5% en términos reales.