Este miércoles a la medianoche, más de 15 mil personas estaban conectadas al vivo de YouTube de Schmidt Ocean Institute en donde científicos y científicas argentinas están explorando el fondo del Mar Argentino y transmitiendo los hallazgos con una calidad fascinante. Durante la tarde de hoy, más de 30 mil.
Durante toda la semana se repitió lo mismo: las transmisiones se hacen durante 9 horas o más por día y hay miles de personas conectadas y haciendo preguntas en vivo, que los científicos de turno responden. TN habló con Daniel Lauretta, graduado de la UBA, Investigador del Conicet e investigador jefe de esta expedición, para conocer más de este fenómeno y sus implicancias para la ciencia argentina.
Un grupo de científicos argentinos de distintas provincias y organismos se organizaron en el Grupo de Estudios del Mar Profundo de Argentina (GEMPA).

Hay especialistas de Conicet, UBA, Universidad de Mar del Plata, Prefectura, Museo de la Plata, entre otros. Aplicaron y obtuvieron un financiamiento de la organización californiana sin fines de lucro Schmidt Ocean Institute para explorar entre el 22 de julio y el 10 de agosto el cañón submarino de Mar del Plata, un ecosistema único de hasta 3700 metros de profundidad en donde confluyen las corrientes marinas Brasil-Malvinas.
El Schmidt Ocean Institute aportó un robot submarino, el ROV SuBastian, que graba imágenes en altísima calidad y transmite en vivo. Permite tomar muestras gracias a pinzas y un mecanismo de succión parecido a una aspiradora. Guarda todo en contenedores y se maneja de forma remota desde Falko, el barco que opera en la superficie. Allí los 25 científicos y científicas de distintas disciplinas van monitoreando lo que ven y eligiendo qué muestras tomar. Se recolectaron al momento más de 400 ejemplares, algunos desconocidos para la ciencia.
El objetivo de la misión es mapear el fondo del Mar Argentino, conocer de primera mano cómo funciona el ecosistema, el estado de la biodiversidad y del suelo, si hay impacto de la pesca y la presencia de plásticos y microplásticos.
“Lo que más me sorprendió es poder ver ejemplares vivos, in situ, que siempre los veíamos cuando los sacábamos con red pero no es lo mismo. Hay ejemplares que no se parecen a sí mismos, es increíble. Estamos sorprendidos por la diversidad que hay”, aseguró Lauretta.