El Gobernador, junto con otros mandatarios provinciales, firmó una declaración conjunta para renovar el compromiso con la búsqueda de justicia a casi 30 años del atentado terrorista al edificio de la mutual judía.
El Gobernador Alfredo Cornejo participó este martes en el Encuentro Federal por la Memoria, que se desarrolló en la AMIA, a casi 30 años del atentado terrorista del 18 de julio de 1994 al emblemático edificio de la mutual judía.
Al igual que el mandatario mendocino, varios gobernadores de otras provincias participaron en este encuentro en el que se firmó una declaración conjunta para renovar el compromiso con la búsqueda de justicia y con la denuncia de la impunidad vigente en la causa mencionada.
El Encuentro Federal por la Memoria se enmarca en el Mes de la Memoria. Esta iniciativa, que busca visibilizar la lucha contra el olvido y la búsqueda de justicia, es desarrollada por la AMIA durante los 30 días previos al aniversario del atentado.
Luego de la actividad, el Gobernador Cornejo comentó: “Celebramos la convocatoria federal en apoyo a la Justicia por el atentado a la AMIA, ya que la presencia masiva de muchos gobernadores demuestra la relevancia que tiene la AMIA para las provincias, su historia y también el triste atentado”. Además, explicó que “no es solo de la capital de nuestro país, de la Ciudad de Buenos Aires, sino que también es del interior productivo, del interior generador de riquezas, del interior con problemas, con dificultades, pero también con talentos, creatividad, organización, con sociedad civil muy viva y activa”.
El mandatario puso el acento en la federalización de la convocatoria “porque nuestro sistema y nuestra Constitución lo sostiene así”, y remarcó: “Celebramos haber sido convocados para dar testimonio de nuestro apoyo a que en la Argentina haya justicia ante el principal atentado que ha sufrido nuestro país en toda su historia”.
En cuanto a la comunidad judía, Cornejo remarcó que se siente orgulloso, como argentino y mendocino, “de la diversidad cultural, tolerancia, convivencia, de nuestra paz, comparado con muchos otros países”. A esto le sumó que “ese atentado no fue, como a veces se intenta tergiversar, un atentado solo a la colectividad judía, sino a toda la Argentina”, y dijo: “Por eso estamos aquí para pedir justicia por esas 85 víctimas, para los familiares, para todos los que forman la AMIA y justicia para la Argentina”.
Además de Cornejo estuvieron presentes Axel Kicillof (Buenos Aires), Jorge Macri (CABA), Raúl Jalil (Catamarca), Martín Llaryora (Córdoba), Leandro Zdero (Chaco), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Sergio Ziliotto (La Pampa), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Claudio Poggi (San Luis), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Vidal (Santa Cruz y Osvaldo Jaldo (Tucumán). También estuvieron presentes el jefe de Gabinete de ministros, Guillermo Francos, y el vicegobernador de Río Negro Pedro Pesatti, entre otros.
Para el presidente de AMIA, Amos Linetzky, fue una la jornada inédita, ya que por primera vez se reunieron la mayoría de los gobernadores de la Argentina para dejar expresada su voluntad y compromiso con la imperiosa necesidad de que en la causa AMIA se haga justicia. “Para la institución, el encuentro cobra especial relevancia para federalizar el reclamo de justicia y reforzar el hecho de que el atentado del 18 de julio de 1994 fue un ataque contra toda la sociedad argentina”, sostuvo.
Algunos puntos de la declaración conjunta
Los gobernadores presentes firmaron una declaración conjunta para renovar el compromiso con la búsqueda de justicia y con la denuncia de la impunidad vigente en la causa. Entre otros puntos se comprometieron a garantizar el cumplimiento de las siguientes acciones:
Realizar y apoyar la organización de actividades tendientes a denunciar la impunidad vigente en la causa, y mantener vivo el reclamo de justicia, y el homenaje permanente a las 85 víctimas fatales de la masacre perpetrada el 18 de julio de 1994.
Emprender iniciativas que promuevan la paz, la defensa de los derechos humanos, la convivencia en la diversidad, y que fomenten el ejercicio de la memoria colectiva para evitar el germen de toda acción de odio y discriminación.
Asegurar que la educación sea un pilar central para transmitir valores de respeto, concordia y solidaridad, y para enseñar, a las futuras generaciones, las funestas consecuencias que el terrorismo y la violencia dejan en la sociedad.
Contribuir con proyectos y programas sociales, culturales y educativos al combate contra el antisemitismo y la xenofobia, promoviendo una cultura de respeto y entendimiento mutuo.